Recopilado por Ricardo Bittelman Saporta, oftalmólogo
La ceguera temporal, también denominada amaurosis fugaz, es un evento breve de ceguera en un ojo (monocular). Generalmente, este síntoma aparece de manera repentina, siendo generado por una obstrucción o bajo flujo de sangre que provee al globo ocular.
El bloqueo habitualmente se desarrolla por el desprendimiento de algún coágulo o placa – pequeña parte de colesterol – que se desprende de una arteria principal y se mueve hacia el cerebro u ojo, alojándose en la arteria fundamental que alimenta al órgano.
Este estado, por lo general, es breve. En muy pocos casos se convirte en una condición permanente.
La causa principal para la aparición de este problema es la aterosclerosis de la arteria carótida en el cuello, la que a la vez tiene los siguientes factores de riesgo: colesterol alto, diabetes, hipertensión, tabaquismo y problemas cardiacos.
Para disminuir las probabilidades de esta enfermedad, se aconseja adoptar las siguientes medidas: incrementar el consumo de frutas y verduras, reducir la ingesta de productos ricos en grasas, realizar ejercicio regularmente y evitar el consumo de cigarrillos.