La distrofia de Fuchs es una enfermedad por lo general hereditaria. Existe una posibilidad de un 50% que se transmita si uno de los padres la padecen.
Afecta a las células que recubren la superficie interna de la córnea la cual comienza a morir lentamente.
Es más común en mujeres que en hombres. Y las molestias nunca se hacen presentes antes de los 40 años. Estas causan mucho dolor en el ojo, visión borrosa y el empeoramiento de esta durante el día.
Se recomienda asistir al doctor en caso de tener antecedentes familiares de la enfermedad.