La conjuntiva es un tejido muy vascularizado que rodea el globo ocular. En un ojo sano es trasparente y permite visualizar el color blanco de la esclerótica. Cuando la conjuntiva se inflama, los vasos se dilatan y se hacen visibles provocando el conocido enrojecimiento ocular.
El globo ocular también puede enrojecer debido a la presencia de una hemorragia conjuntival secundaria a la ruptura de estos vasos, a consecuencia de un traumatismo o bien de forma espontánea en pacientes con fragilidad capilar.
Son muchas las enfermedades oculares que cursan con ojo rojo. Las principales son: la conjuntivitis, las lesiones de la córnea, la uveítis y el glaucoma agudo.?El diagnóstico de cada una de estas entidades que comparten un aspecto ocular externo similar, requiere del conocimiento de cada uno de los síntomas y los signos exploratorios característicos.
Es típico encontrar picor en las reacciones alérgicas, sensación de cuerpo extraño en las conjuntivitis, el dolor del glaucoma y la uveítis … etc. Una adecuada exploración oftalmológica completa permitirá el diagnóstico definitivo.
La conjuntivitis infecciosa es con mucho la causa más frecuente de ojo rojo en una consulta oftalmológica. No hay que alarmarse pero hay que seguir medidas higiénicas estrictas para evitar el contagio. Se aconseja no compartir toallas, servilletas, pañuelos o fundas de almohada. Es muy importante lavarse las manos tras el contacto con los ojos y utilizar pañuelos de celulosa. Aunque sea contagiosa sólo durante los primeros días, el proceso inflamatorio puede alargarse hasta un mes.? ?El uso inadecuado de las lentes de contacto es una causa frecuente de ojo rojo. Podemos observar una inflamación de la córnea y laconjuntiva (queratoconjuntivitis) provocada por el uso excesivamente prolongado de las lentes de contacto, o bien por la intolerancia a las soluciones de limpieza. La falta de una higiene adecuada en los portadores de lentillas puede favorecer la presencia de una úlcera corneal con consecuencias desastrosas.
La úlcera corneal, generalmente infecciosa, puede producir un enrojecimiento ocular acompañado de dolor y pérdida de visión debido a la presencia de una mancha blancuzca en la córnea. El cultivo microbiológico y el tratamiento antibiótico inmediato son indispensables a fin de evitar una cicatriz definitiva (leucoma corneal) o incluso la perforación ocular.
Ricardo Bittelman